Después de varios días de consolidación estrecha durante la Navidad y el fin de semana, la volatilidad de Bitcoin sigue siendo severamente comprimida. Durante el fin de semana, se volvió a registrar un movimiento alcista, con un rápido impulso en la mañana que elevó el precio desde el mínimo de 87,402 hasta un máximo de 88,023. Ethereum también siguió la tendencia al alza, alcanzando los 2,954. El espacio de ganancia a corto plazo es bastante considerable, y la tendencia actual mantiene una coherencia básica con las ideas previas, sin desviaciones direccionales en este momento.

Desde el análisis técnico, el gráfico diario ha estado oscilando entre la banda media y la banda inferior en las últimas sesiones. Cada ruptura termina con una sombra superior, lo que indica que los compradores intentan impulsar el mercado, pero la fuerza se ha debilitado claramente. En el futuro cercano, seguirá en un estado de consolidación y lucha, esperando una señal de ruptura secundaria. En el gráfico de cuatro horas, se observa que los picos se van desplazando gradualmente a la baja, mientras que los mínimos suben ligeramente, estrechando aún más el rango triangular. A corto plazo, no hay una señal clara de movimiento unidireccional. Sin embargo, en el gráfico semanal, el precio sigue consolidándose en la zona inferior, sin lograr una reversión alcista efectiva, por lo que el patrón bajista a gran escala no ha cambiado.

En cuanto a la estrategia operativa, se recomienda seguir considerando las zonas de resistencia en los intervalos de consolidación de corto plazo como principales referencias para entrar en posiciones cortas. En términos simples, mientras el precio no supere eficazmente la resistencia reciente, ese será un punto ideal para ingresar en posiciones bajistas.

Expectativa a corto plazo: Bitcoin encuentra resistencia cerca de 88,500, con un objetivo bajista en 86,000; Ethereum enfrenta presión alrededor de 2,980, con un objetivo bajista en 2,880.