Cinco principios financieros que vale la pena transmitir:

Ahorrar no se trata de lo que queda—se trata de pagarte a ti mismo antes de que alguien más se lleve su parte.

¿Invertir? Eso es cuando tu dinero comienza a trabajar más duro que tú.

La deuda significa que estás pagando por las decisiones de ayer con las ganancias de mañana.

El presupuesto le da a cada dólar un trabajo, para que ninguno de ellos desaparezca en el aire.

El interés compuesto es lo más parecido a la magia real en finanzas: pequeñas cantidades, con el tiempo, se convierten en algo enorme.

Estas no son solo lecciones para los niños. La mayoría de los adultos tampoco las aprendieron.