Recientemente, en el mercado ha comenzado a circular un tema antiguo: Estados Unidos va a inyectar dinero.

Puede que pienses que esto no tiene mucho que ver contigo, después de todo, palabras como política fiscal y expansión de deuda suenan complicadas. Pero, en realidad, en cuanto la Reserva Federal empieza a actuar, el flujo de fondos globales debe reorganizarse, incluyendo las criptomonedas en tu cartera.

**Veamos algunos datos**

El saldo de la cuenta TGA del Departamento del Tesoro de EE. UU. cayó directamente de 870 mil millones de dólares en septiembre a ahora 480 mil millones. Casi 400 mil millones de dólares en liquidez se han liberado en el mercado.

¿El balance de la Reserva Federal? Ha estado en aumento durante tres semanas consecutivas. ¿Qué significa esto? Que han comenzado a comprar bonos otra vez.

Además, el saldo de RRP (operaciones de recompra overnight) ha caído a su nivel más bajo desde 2021. El dinero ya no está en la Reserva Federal, sino que vuelve a circular en el mercado.

Al juntar estas tres pistas, la conclusión es clara: aunque la Fed dice que está en modo "restrictivo", en realidad ya está empezando a inyectar dinero.

**¿A dónde va ese dinero?**

Muchos piensan que esta liquidez adicional irá directamente al mercado de criptomonedas, pero en realidad no es así.

El primer destino suele ser el mercado tradicional: bonos del gobierno, acciones, commodities... los "jugadores serios" primero comen esa carne. Pero cuando ya han saciado su apetito, el dinero que sobra busca nuevas salidas — y en ese momento, los activos de riesgo se vuelven muy atractivos.

Bitcoin, Ethereum, altcoins, tokens de IA, sectores RWA... todos empiezan a captar esa liquidez.

Mira las últimas dos semanas:
Bitcoin subió de 93,000 a 106,000 dólares;
Ethereum, SOL, ZEC se han disparado en precio;
La capitalización total de las stablecoins volvió a superar los 170 mil millones de dólares...

No es casualidad. Cuando la liquidez se afloja, la preferencia por el riesgo aumenta, y el dinero naturalmente se dirige a lugares con mayor volatilidad.

Así que la próxima vez que escuches que "la Reserva Federal está imprimiendo dinero", no pienses que no te afecta — si tus activos digitales suben o bajan, probablemente dependa de si la máquina de imprimir dinero en el otro lado del océano ha estado en marcha o no.