La verdadera estatura de Elon Musk: un gigante controvertido en el mundo de la tecnología

Medir 1,88 metros en este mundo ya es bastante, pero cuando eres Elon Musk, parece que tocas el cielo. Mira, yo siempre me he preguntado si su altura física tiene algo que ver con ese ego desmedido que maneja. ¡Vaya que lo tiene!

Desde mi perspectiva como observador cercano de la industria tecnológica, puedo decirte que su estatura es solo la punta del iceberg. Cada vez que entra en una sala, no solo impone por sus centímetros - impone porque sabe que tiene el poder de hundir mercados enteros con un simple tuit.

La verdad es que me fastidia un poco cómo los medios relacionan su altura con su supuesto "genio". Como si medir 1,88 te diera automáticamente derecho a manipular mercados financieros. ¡Menuda tontería! Lo que nadie menciona es cómo utiliza esa presencia física intimidante en reuniones de negocios.

He visto cómo esos 188 centímetros se vuelven una herramienta más de manipulación. En las conferencias, domina el escenario no solo por su estatura sino por esa pose de "soy más listo que todos ustedes juntos". Y la gente se lo cree, ¡vaya que se lo cree!

Sus apariciones públicas son casi teatrales. Mientras que Zuckerberg con sus 1,70 metros tiene que compensar de otras maneras, Musk simplemente se planta ahí, impone su estatura y dice cualquier disparate sobre las criptomonedas. Y al día siguiente, miles pierden sus ahorros porque decidió tuitear algo sobre alguna moneda.

Y no me hagas hablar de sus comparaciones con Steve Jobs. Jobs tenía visión; Musk tiene altura y una cuenta en redes sociales. Cuando lanza esos comentarios sobre Bitcoin o Dogecoin, no es un visionario - es un manipulador que sabe que su posición le permite jugar con el dinero ajeno.

¿Su estilo de vida saludable? ¡Por favor! Conozco gente cercana a él que cuenta otra historia. El tipo apenas duerme, vive a base de café y comida rápida. Pero claro, nadie habla de eso porque arruinaría la imagen perfecta del alto y poderoso Elon.

En fin, 1,88 metros de altura y un ego del tamaño del universo. Un combo peligroso que sigue influyendo en mercados enteros mientras nosotros seguimos hablando de su estatura como si eso fuera lo importante.