El año pasado conocí a un colega que, cuando acababa de entrar en el mundillo, ni siquiera sabía leer una gráfica de velas; se quedaba dormido mirando la pantalla y le temblaban los dedos al hacer una orden. Pero en menos de tres meses, convirtió 6000U en 170.000U, y el día que retiró el dinero ni él mismo se lo creía.

No hay ningún secreto mágico, solo se apoyó en cinco trucos tan simples como testarudos, y a base de insistir, lo consiguió:

**Primer truco: dividir la posición como si fuera tofu.**
6000U divididos en 60 partes, solo movía 100U cada vez. Algunos decían que era más cobarde que un ratón, pero a él le daba igual: cuando ganaba, aumentaba según la fórmula, nunca metía más dinero solo porque el mercado pintara bien.

**Segundo truco: solo seguir señales claras.**
No se volvía loco mirando indicadores, solo dos condiciones: en el gráfico de 1 hora, la media de 7 cruza al alza la de 21, y en el de 4 horas, el MACD se pone en rojo por debajo del eje cero; solo si se daban ambas entraba, y tras tres meses, la tasa de acierto se mantenía en torno al 78%.

**Tercer truco: disciplina inhumana.**
En cuanto abría posición, ponía take profit y stop loss inmediatamente: si perdía un 1% (1U de cada 100U), salía enseguida; si ganaba un 3% (3U), cerraba posición. Todo ejecutado automáticamente, sin dudar ni medio segundo.

**Cuarto truco: el interés compuesto como una bola de nieve.**
Cuando ganaba, invertía la mitad entre principal y beneficios, o solo usaba el 2% del total de fondos para operar. Así la cuenta iba creciendo poco a poco; parecía prudente, pero en realidad estaba maximizando su ventaja.

**Quinto truco: evitar los "campos de lechuga".**
Tras varias malas experiencias, hizo una lista negra: no operaba en las 24 horas previas y posteriores a los datos de empleo de EE.UU., ni los viernes de 8 a 10 de la noche; solo elegía operar de 1 a 3 de la madrugada, "cuando el mercado está más limpio y hay menos trucos de los grandes".

Este método puede sonar rígido y nada espectacular. Pero gracias a esa terquedad, convirtió un pequeño capital en una gran suma.

En este mercado, la mayoría no pierde por falta de técnica, sino por impaciencia, avaricia o por cambiar las reglas a mitad de camino. No envidies solo a los que se hacen ricos de la noche a la mañana: si puedes convertir 6000U en 170.000U depende de si eres capaz de ser “lo bastante simple” y seguir las reglas con firmeza; la mejor suerte en el mundo cripto es, en realidad, hija de la disciplina.

Los que sobreviven y ganan en el mercado son siempre los que se atreven a entrar, pero saben cuándo salir.

Y tú, ¿te animas a probar?