Mientras todo el mundo especula con el concepto de la IA, hay quien da una respuesta especialmente sensata: déjate de hablar de lo que pasará dentro de mil años y céntrate primero en hacer bien lo que se puede implementar en los próximos tres o cinco años.
Esta forma de pensar parece sencilla, pero su lógica es bastante clara: los sociólogos disfrutan hablando del futuro lejano, a los científicos les encanta dibujar grandes planes a diez años vista, pero los verdaderos técnicos se enfocan en “cómo los grandes modelos y la gran capacidad de cómputo pueden resolver problemas reales en la industria”.
¿Cómo se hace esto concretamente? Basta con ver algunos ejemplos.
En el puerto, el Puerto de Tianjin ya ha conseguido la automatización total: desde la carga y descarga de contenedores hasta el apilado y el despacho de aduanas, la IA conecta todo el proceso. Bajo tierra, en las minas, se va aún más lejos: mediante modelado de datos se predice directamente el riesgo de explosión de gas, de modo que los mineros ni siquiera tienen que bajar a la mina. Los hospitales también están cambiando: el Hospital Ruijin ha desarrollado un gran modelo patológico que ayuda a los médicos a mejorar la precisión de los diagnósticos, lo que significa que la experiencia de los buenos médicos puede replicarse en más lugares.
El caso más interesante es el de la acería: en una industria tan tradicional como la de los altos hornos, el gran modelo de IA optimiza los parámetros de control mediante simulaciones dinámicas, y aunque solo aumente la eficiencia en un 1%, en términos de producción eso se traduce en cifras astronómicas.
En resumen, este enfoque no busca una innovación disruptiva, sino que se centra en mejorar cada eslabón, por pequeño que sea. Puede que no suene espectacular, pero probablemente sea más fiable. Al final, la tecnología está para servir a las personas: liberar a los mineros de entornos peligrosos, permitir que los médicos diagnostiquen con mayor precisión... Eso es lo que realmente debería hacer la IA.
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
23 me gusta
Recompensa
23
7
Republicar
Compartir
Comentar
0/400
Anon4461
· 12-06 07:16
La parte de la automatización en el puerto de Tianjin es realmente impresionante, pero lo que más me interesa es el tema de los mineros: directamente se están salvando vidas, eso sí que es el verdadero propósito de la tecnología.
Si lo comparamos con ese enfoque pragmático, los que se pasan el día presumiendo de AGI la verdad es que suena un poco vacío.
Un 1% de mejora en eficiencia, convertido en dinero, es realmente una cifra aterradora; el caso de la planta siderúrgica me ha impactado.
En lugar de hablar de “innovación disruptiva”, prefiero que se resuelvan problemas reales de forma honesta; apoyo totalmente este enfoque.
Ver originalesResponder0
LiquidatedAgain
· 12-05 08:50
Dios mío, por fin alguien lo ha dicho. Esos que se pasan el día vendiendo futuros grandiosos tienen la misma mentalidad que yo cuando hice all-in en alguna shitcoin: solo piensan en multiplicar por mil, pero nunca piensan en cuál es el precio de liquidación. Los casos del puerto de Tianjin, las minas y los hospitales, esos sí que son verdaderos puntos de control de riesgos, cada uno es algo realmente tangible y aplicable. Comparado con los que solo venden humo, yo confío más en esa mejora del 1% de eficiencia de una acería: eso no puede hacerte saltar por los aires, al contrario, es estable.
Ver originalesResponder0
MergeConflict
· 12-05 08:49
De verdad, dejad de pensar siempre en volar al espacio, los casos del puerto de Tianjin y las minas son lo realmente importante.
Esto sí que es el trabajo que debería hacer la IA, sin postureos.
Un 1% de mejora en eficiencia se traduce en dinero, es increíble, así es como las industrias tradicionales están siendo superadas.
Sinceramente, esto es mucho más fiable que especular con conceptos, ¿quién sigue creyendo en esas promesas de diez años?
¿Que los mineros ya no tienen que bajar a la mina? A esto se le llama tecnología que salva vidas.
Me parece mucho más valioso que esas promesas vacías.
Ver originalesResponder0
ForkThisDAO
· 12-05 08:49
La verdad, comparado con los que solo venden promesas sobre el futuro, me convence mucho más este enfoque. La automatización del puerto de Tianjin y las alertas en minas generan un valor real, no son conceptos de monedas de aire.
Un aumento del 1% en eficiencia, traducido en dinero, es realmente una cifra astronómica. Esto sí que es el trabajo que debería hacer la IA.
Algunos siguen vendiendo humo, mientras otros ya están actuando. Así es como surgen las diferencias.
Me interesa especialmente la mejora en la precisión de los diagnósticos médicos; la digitalización médica debería ser el mayor océano azul de oportunidades.
Estoy cansado de oír lo de que la IA va a acabar con la humanidad; lo que de verdad aprecio es la reducción de costes y el aumento de eficiencia.
Esta forma de pensar realmente está enraizada en la realidad, sin juegos de conceptos, todo es práctico y aplicable.
Ver originalesResponder0
gaslight_gasfeez
· 12-05 08:48
Lo del puerto de Tianjin es realmente increíble, el puerto automatizado ya está funcionando completamente y todavía hay gente hablando todo el día de la AGI como salvadora del mundo. Despertad, por favor.
Ver originalesResponder0
OptionWhisperer
· 12-05 08:38
Hace tiempo que tengo claro que la automatización del puerto de Tianjin tiene mucho más sentido que toda la especulación con la AGI; aquí es donde realmente está el dinero.
Ver originalesResponder0
PaperHandsCriminal
· 12-05 08:25
La verdad, comparado con los que todos los días hablan de que la AGI destruirá a la humanidad, confío más en este tipo de soluciones aburridas hasta la muerte... La automatización de puertos, la alerta temprana en minas, esas sí que son actividades que realmente generan beneficios.
Mientras todo el mundo especula con el concepto de la IA, hay quien da una respuesta especialmente sensata: déjate de hablar de lo que pasará dentro de mil años y céntrate primero en hacer bien lo que se puede implementar en los próximos tres o cinco años.
Esta forma de pensar parece sencilla, pero su lógica es bastante clara: los sociólogos disfrutan hablando del futuro lejano, a los científicos les encanta dibujar grandes planes a diez años vista, pero los verdaderos técnicos se enfocan en “cómo los grandes modelos y la gran capacidad de cómputo pueden resolver problemas reales en la industria”.
¿Cómo se hace esto concretamente? Basta con ver algunos ejemplos.
En el puerto, el Puerto de Tianjin ya ha conseguido la automatización total: desde la carga y descarga de contenedores hasta el apilado y el despacho de aduanas, la IA conecta todo el proceso. Bajo tierra, en las minas, se va aún más lejos: mediante modelado de datos se predice directamente el riesgo de explosión de gas, de modo que los mineros ni siquiera tienen que bajar a la mina. Los hospitales también están cambiando: el Hospital Ruijin ha desarrollado un gran modelo patológico que ayuda a los médicos a mejorar la precisión de los diagnósticos, lo que significa que la experiencia de los buenos médicos puede replicarse en más lugares.
El caso más interesante es el de la acería: en una industria tan tradicional como la de los altos hornos, el gran modelo de IA optimiza los parámetros de control mediante simulaciones dinámicas, y aunque solo aumente la eficiencia en un 1%, en términos de producción eso se traduce en cifras astronómicas.
En resumen, este enfoque no busca una innovación disruptiva, sino que se centra en mejorar cada eslabón, por pequeño que sea. Puede que no suene espectacular, pero probablemente sea más fiable. Al final, la tecnología está para servir a las personas: liberar a los mineros de entornos peligrosos, permitir que los médicos diagnostiquen con mayor precisión... Eso es lo que realmente debería hacer la IA.