Veinte años. Eso es lo que pasó una nación latinoamericana construyendo puentes con Moscú, Pekín, La Habana y Teherán, todo en nombre de desafiar el dominio de Washington sobre el poder global. ¿El sueño? Un mundo multipolar donde las viejas reglas no se aplican. ¿La realidad? Esa alianza se está desmoronando más rápido de lo que cualquiera esperaba. Resulta que forjar un nuevo orden mundial requiere más que agravios compartidos. Cuando tu base económica es inestable y tus patrocinadores tienen sus propias crisis que gestionar, la ambición por sí sola no es suficiente. El tablero de ajedrez geopolítico es brutal, y algunos movimientos simplemente no dan resultado.
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AllInDaddy
· hace6h
Los sueños son exuberantes, pero la realidad es muy dura, veinte años perdidos...
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GasFeeCrier
· 12-01 00:49
¿Espera, ¿20 años de preparación se desvanecieron así? ¿Qué pasó con la multipolaridad? ¿Cómo es que con una dificultad económica se revela la verdadera forma?
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ImaginaryWhale
· 12-01 00:46
Veinte años desperdiciados, esa es la realidad.
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TopBuyerBottomSeller
· 12-01 00:44
¿Veinte años perdidos? ¿Es tan fácil que se desmorone el sueño de la multipolaridad que esos países están persiguiendo...? Se suponía que debíamos unirnos para calentarnos, pero al final, todo depende de quién tenga más dinero.
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CounterIndicator
· 12-01 00:39
Ja, otra historia de sueños rotos por la realidad. La frase "la base económica lo determina todo" sigue siendo cierta.
Veinte años. Eso es lo que pasó una nación latinoamericana construyendo puentes con Moscú, Pekín, La Habana y Teherán, todo en nombre de desafiar el dominio de Washington sobre el poder global. ¿El sueño? Un mundo multipolar donde las viejas reglas no se aplican. ¿La realidad? Esa alianza se está desmoronando más rápido de lo que cualquiera esperaba. Resulta que forjar un nuevo orden mundial requiere más que agravios compartidos. Cuando tu base económica es inestable y tus patrocinadores tienen sus propias crisis que gestionar, la ambición por sí sola no es suficiente. El tablero de ajedrez geopolítico es brutal, y algunos movimientos simplemente no dan resultado.